Cavilaciones

Cavilaciones

! Feliz aniversario de las Lima’s !

Yo nací en Lima. Fue circunstancial. Como miles de personas, mi papá, mamá y mi viejo migraron a Lima para estudiar en San Marcos. Mi padre creció en Huacho pero sus orígenes maternos vienen del Cuzco y los paternos son de Lima. Mi madre nació en Nepeña, un valle costeño de Ancash, de donde es también su madre; ella tiene también sus orígenes paternos en Yungay, donde nació su padre, pero sabemos que venían de Lima, pero tuvieron que huir cuando lo de la guerra con Chile. A esos, mis orígenes, se suma que también me siento de Huánuco, mi viejo, el padre de mis hermanxs, con quién crecí, y aportó a mis orígenes, nació y creció allá.

Yo nací en Lima, sí, en una de las Limas, debería precisar. Hasta los 9 años viví en barrios clase-medieros. El que más recuerdo es el de Pueblo Libre, en un edificio ubicado detrás del paradero mercado de la avenida La Mar cuando los buses están en dirección de San Miguel. No sé si aun se llama así. Nunca pregunté por los orígenes de mis amigos de barrio. Tampoco me lo preguntaron a mí. ¿Es algo típico de un barrio así, o es más el hecho de ser niñxs que hizo que no fuera un tema de conversación?

A los 9 años me tocó mudarme a otra Lima. Por cosas de mi historia, que he contado públicamente, nos tuvimos que mudar, dejar el departamento en Pueblo Libre y nos mudamos a San Juan de Lurigancho. Contar todo los cambios que eso significó en mi cotidianidad, materialmente, culturalmente, sería largo para este post, además mucho ya lo conté en mi libro #DeSilenciosYOtrosRuidos.

Lo que sí, en ese barrio al que llegué a vivir, no era necesario preguntar, los orígenes estaban presentes. Cada tanto llegaba la familia de alguien del barrio y se quedaba, y contaban anécdotas de la región de donde venían, o de como estaba la familia. A veces eran las propias familias del barrio que se iban a visitar a sus familias en sus pueblos de origen. Y otras tantas se celebraba una festividad tradicional a alguno de los pueblos a los que pertenecían los vecinos y vecinas: fiestas de Ayacucho, de Huánuco, de Pasco. La relación con la pacha de origen nunca fue sólo una historia, siempre fue, y siguen siendo, una vivencia cotidiana.

En ese barrio crecí. En ese territorio que alguna vez fue el de los Rurincancho, quienes venían de lo que hoy es Huarochirí. Un territorio que ha albergado diversas holas migratorias. Viví cerca de Huanta, a donde llegaron desplazadas miles de personas en la época de la guerra interna. Al lado de mi barrio está la urbanización Eduardo de la Pinela, llamada así en honor a uno de los periodistas asesinados en Ucchuraccay.

Hoy a miles de kilómetros de distancia recuerdo mi ciudad natal, Lima, recuerdo las distintas Lima’s. Recuerdo, y prefiero quedarme con las historias de luchas, de alegría, de vidas que siguen siendo a pesar de todo lo malo que lxs mismxs de siempre buscan mantener para seguir enriqueciéndose. Mi Lima, mis Lima’s, las que añoro son esas, las de lxs migrantes que aportan desde sus historias y tradiciones a construir una Lima que sí nos represente, una en donde no haya más racismo ni clasismo y que nos permite abrazarnos para caminar juntxs!

Esa es la Lima que festejo y que añoro!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *